De encuestas y tendencias

Omar Rocha Rojo*

Cuando falta muy poquísimo para la fecha límite de inscripción de candidaturas, se ha conocido al menos cinco encuestas nacionales, el inicio de la construcción del padrón biométrico y un intenso debate respecto a las candidaturas presidenciales, en ese orden se advierte la generación de ciertas tendencias de opinión entre la población, que por supuesto serán los resultados de la elección nacional que se avecina las que confirmen o desvirtúen las mismas.

1. Existe una coincidencia en todos los sondeos de opinión respecto a la intención de voto a favor del Candidato del Gobierno que oscila entre el 40 y 43 %, cuyo apoyo se ha estancado en estos porcentajes con la tendencia a decrecer, más que a incrementarse. Esto explica el surgimiento de una intempestiva oleada de ataques a periodistas, al biométrico y a otras instituciones desde diversos frentes gubernamentales, incluido el candidato, que sin duda es la demostración de nerviosismo y temor en las filas oficialistas de no poder alcanzar sus metas electorales propuestas.

2. Se advierte en un importante y mayoritario sector de la población, que conforme van pasando los días, consolidan también una irreversible decisión de no votar por el candidato oficialista por las políticas que se implementan; de estos sectores muy pocos se pronuncian concretamente por un candidato no oficialista y la mayoría esta esperando el desenlace de la etapa pre electoral.

3. Samuel Doria Medina, aparece muy claramente en el primer lugar de la preferencia ciudadana entre los candidatos no oficialistas, por la claridad y seriedad del programa económico presentado; los efectos de la propuesta en la sociedad que supera las mezquindades de la polarización; la concentración en la solución de los problemas urgentes de la gente desterrando a un último plano el enfrentamiento político, la discusión ideológica y de posiciones que solo dividen y no son constituyen base de convergencia y encuentro entre los bolivianos.

4. El proceso de construcción de un frente amplio, único o lo que quiera llamarse, ha tenido un efecto de rechazo en la población, en virtud de negarse a volver al pasado y la no renovación del sistema político. El espectáculo grotesco montado por los impulsores de esta iniciativa, ha develado las debilidades de los interesados y expuesto las miserias del viejo sistema político como las ambiciones personales, temores por ser excluido del ámbito político, la actuación de grupos de interés responsables del manejo del poder estos últimos años etc. en virtud de ello, en criterio generalizado de la gente esta intención ha fracasado, por la ambición y mezquindades de sus integrantes y por subestimar la inteligencia de la población que esta consciente perfectamente con lo que ocurre en nuestro país al ser la victima directa de la política y los Gobiernos en estos últimos años.

5. A estas alturas de los acontecimientos, no considerar el sentimiento ciudadano, es subestimar su capacidad crítica y asumir que la población es manipulable fácilmente como en el pasado. En consecuencia presionar con falsos fantasmas post electorales en caso de no lograr que en la misma bolsa ingresen todos sin diferencias y escrúpulos con pretexto de unidad, puede conducir a que esa bolsa se convierta en el depositario de los restos políticos del proceso electoral.